Cumbre mundial de alcaldes de C-40

POLÍTICA.

El jefe de gobierno porteño oficia de anfitrión en un encuentro global de alcaldes para debatir sobre el cambio climático; detalló su plan presidencial ante emisarios del Departamento de Estado.

Horas antes de inaugurar la cumbre mundial de alcaldes de C-40 en el Centro de Convenciones de la Ciudad (CEC), Horacio Rodríguez Larreta, uno de los presidenciables de Juntos por el Cambio, se sometió a un riguroso test en la Embajada de los Estados Unidos. Ayer a la tarde, Larreta se reunió durante una hora con el embajador norteamericano en la Argentina, Marc Stanley, y un importante representante del Departamento de Estado, Kevin O’Reilly, quien viajó al país para participar de la cumbre global C-40, que integran las principales ciudades del mundo como Londres, París y Nueva York, entre otras.

A lo largo de la conversación, el jefe porteño, quien aspira a competir por la sucesión de Alberto Fernández en 2023, desmenuzó su plan de gobierno y analizó la coyuntura política y social. Además de Stanley y O’reilly, lo escuchaban los integrantes del staff político y económico de la Embajada norteamericana. En esa charla coincidieron en que la Argentina tiene una “oportunidad” de desarrollo frente al nuevo escenario internacional por la guerra entre Rusia y Ucrania, ya que el mundo demandará alimentos o energía.

Con el objetivo de estrechar lazos con Estados Unidos y posicionarse en el plano internacional, Larreta remarcó ante sus interlocutores que su prioridad, en caso de que Juntos por el Cambio gane las próximas elecciones, será estabilizar la economía e impulsar reformas para que el país “vuelva a crecer” y genere confianza entre los inversores. Al reseñar su proyecto político, Larreta puso énfasis en que las fundaciones de los partidos que integran JxC diseñan un plan de gobierno e insistió en que para sostener los cambios estructurales en la economía a largo plazo se requerirá un consenso amplio. Machacó con que no alcanzará con el crédito político y social que obtenga JxC en las urnas y que la fuerza necesitará ensanchar su base de sustentación con acuerdos. En ese punto, los representantes de Estados Unidos quisieron saber si el programa que prepara tendrá el aval de todos los socios de la alianza. “El desafío no es solo concordar un plan, sino lograr una verdadera noción de coalición de gobierno. Trabajo para eso”, respondió Larreta, quien asistió al cónclave acompañado por Fernando Straface, su principal asesor en materia de política exterior.

Con la cumbre del C-40 en la Ciudad, Larreta intentará reforzar su inserción en el plano internacional con miras a 2023. Durante tres días, el jefe porteño será anfitrión de un encuentro global que reunirá a los alcaldes de las principales ciudades del mundo y en el que se debatirán los efectos del cambio climático y el futuro de las grandes urbes. En el equipo que construye su proyecto presidencial apuntan a que Larreta afiance vínculos con referentes del exterior y sume millas en el tópico de “liderazgo internacional”. En plena disputa electoral por las candidaturas con Patricia Bullrich, el jefe porteño busca ganar un mayor protagonismo en la escena política y cosechar apoyos a su proyecto presidencial entre referentes políticos y dirigentes influyentes del exterior.

“Es una proyección de Horacio que trasciende la ciudad y lo pone como un actor que ayudó a generar una plataforma de incidencia internacional. El cambio climático es un tema de vital importancia para los líderes del mundo”, se entusiasman en la mesa chica de Larreta. En Uspallata se jactan de que importantes referentes internacionales, como John Kerry, enviado presidencial especial de los Estados Unidos para el Clima, o Antonio Guterres, secretario general de la ONU, escucharán vía Zoom los discursos de Larreta durante la cumbre C-40.

Desde que la Ciudad fue electa para organizar el C40, el jefe porteño quiso darle su impronta al evento, una vidriera para su proyecto nacional. De cara a la contienda electoral de 2023, quiso darle una mirada “federal”. “Queríamos ampliar un evento tan importante para que la Argentina sea protagonista, no solo la Ciudad”, dijeron cerca del alcalde.

Por eso, Larreta convocó a 150 intendentes de distinto signo político de todo el país para que participen del Foro Urbano Federal con la excusa formal de firmar la declaración de ciudades argentinas con compromisos ambientales. Asistieron desde Pablo Javkin (Rosario), Bettina Romero (Salta), Martín Llaryora (Córdoba), Emilio Jatón (Santa Fe), Ulpiano Suárez (Mendoza) y Eduardo Tassano (Corrientes), Guillermo Osnaghi (Paso de la Patria, Corrientes) entre otros. Hubo pocos representantes del conurbano -la zona más populosa del país-, pero en la Ciudad argumentan que prefirieron reforzar el enfoque federal, más allá de que la importancia estratégica de las ciudades del AMBA. Entre los emisarios bonaerenses estuvieron jefes municipales de JxC, como Diego Valenzuela (Tres de Febrero), Guillermo Montenegro (General Pueyrredón) o Soledad Martínez (Vicente López), entre otros. No hubo figuras de peso del kirchnerismo.

“Esto da cuenta de la vocación y la capacidad de construir alrededor de temas clave para la agenda de desarrollo, como el cambio climático, un consenso federal que trasciende un gobierno”, afirmó Straface en diálogo con LA NACION.

Hoy, al inaugurar el Foro Urbano Federal en el CEC, Larreta apeló a un tono presidencial y se enfocó en temas de coyuntura, más allá de las menciones a la problemática del cambio climático. La campaña no para.

Frente a una platea plagada por intendentes y ministros porteños, criticó las políticas proteccionistas del gobierno de Alberto Fernández -quien no participará de la cumbre del C40- y pidió una mayor integración. A la vez, cuestionó la “incertidumbre” en materia financiera por el desdoblamiento cambiario. “Me duele ver a la Argentina cada vez más aislada, porque cerrarnos al mundo limita nuestro potencial de crecimiento. En cambio, integrarnos significa inversiones, exportaciones y, sobre todo, trabajo”, detalló en su discurso de apertura. Estuvo escoltado en el escenario por Jorge Macri (Gobierno), quien aspira a pelear por su sucesión, y Straface, secretario general y de relaciones internacionales de la Ciudad.

En ese marco, el jefe porteño remarcó que “los países que se abrieron al mundo de manera inteligente mejoraron su productividad e hicieron crecer sus economías”. “Esto no es una postura ideológica, es un dato objetivo de la realidad”, apuntó.

En otro tramo de su alocución, Larreta defendió su modelo dialoguista y acuerdista: celebró que haya logrado reunir a intendentes de JxC, del PJ y de partidos provinciales. “Esto es lo mejor que podemos hacer: mostrar con el ejemplo que el camino para resolver los problemas de los argentinos es trabajando juntos”, sostuvo.

Mañana, en el cierre de la segunda jornada del C-40, Larreta encabezará el cóctel de bienvenida a las delegaciones internacionales en el Teatro Colón. Allí estarán el resto de los presidenciables de Pro, como Bullrich y María Eugenia Vidal, y los principales referentes nacionales y parlamentarias de Juntos por el Cambio. También asistirán representantes de la cultura e integrantes del establishment. Con una cuidada puesta en escena, Larreta intentará asumir un rol protagónico en plena carrera presidencial. En medio de los trascendidos, los colaboradores del alcalde minimizan por estas horas la chance -casi lo desestiman- de que Milagros Maylin, la nueva pareja del alcalde, participe del evento. “La decisión es de ella”, dicen en el entorno de la flamante pareja. El anuncio había sido planificado durante semanas por un equipo de comunicación. En su carrera de postas para conseguir la candidatura presidencial, el alcalde quiere reducir los errores no forzados ante su estancamiento en las encuestas.

Quien tampoco había confirmado aún su asistencia es Mauricio Macri. Es que el expresidente tenía previsto viajar a Entre Ríos, donde Rogelio Frigerio aspira a competir como candidato a gobernador. Según fuentes porteñas, el fundador de Pro mostró e interés por estar presente, pero su participación quedó supeditada a que logre acomodar su agenda. “Marcó toda la vocación de estar y celebró que se haga la cumbre”, afirmaron desde Uspallata.

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